En Texcoco, cuerpo en costal de yute y una lona
Macabro hallazgo realizaron moradores de esta localidad, al descubrir en una zanja de riego, envuelto en una lona y un costal de yute, el cadáver putrefacto de un hombre desconocido, a quien sus verdugos de manera bestial y cuando todavía estaba vivo, le cortaron ambas manos, mismas que fueron encontradas a un costado del cuerpo.
La PGJEM que sigue siendo "bombardeada" por una serie de asesinatos violentos, casi todos sin aclarar y a la que hasta el momento no le han funcionado los recientes grupos de homicidios que precisamente formó especialmente para investigar todos los asesinatos que a diario se cometen en la entidad mexiquense, informó que se desconoce la identidad del o de los presuntos homicidas y los motivos que tuvieron para asesinar de esa forma al desconocido.
El cadáver del desafortunado hombre fue descubierto la tarde de hoy, dentro de una zanja de riego ubicada en un camino de terracería que conduce al poblado de San Jerónimo Amánalco, en el municipio de Texcoco.
Campesinos de la zona que caminaban por el lugar fueron los encargados de descubrir el macabro paquete, pues al observar que varios perros se peleaban un bulto que parecía un costal de yute blanco y una lona gris, llevados por la curiosidad se acercaron y en ese momento aterrorizados se quedaron al percatarse que se trataba del cuerpo sin vida de una persona a la que le faltaban ambas manos.
Ante lo sorpresivo y macabro del paquete, los asustados campesinos de inmediato dieron parte a las autoridades policiacas, por lo que minutos más tarde se presentaron en el lugar el agente del Ministerio Público, policías judiciales y peritos de la Subprocuraduría de Justicia de Texcoco para dar fe de los hechos.
Una vez que el MP practicó las primeras inspecciones oculares en el lugar, determinó que efectivamente el macabro paquete contenía el cuerpo sin vida de un hombre, el cual presentaba de la cabeza a la cintura una bolsa de lona gris y de la cintura a los pies un costal de yute blanco, mismos que estaban perfectamente amarrados.
Después que el representante social ordenó que el cuerpo fuera desamarrado y sacado, terrible sorpresa se llevó al descubrir que los verdugos del ahora occiso le habían cortado ambas manos, mismas que fueron encontradas a un costado del cuerpo.
Posteriormente cuando el cadáver fue trasladado a las instalaciones del Semefo de la Subprocuraduría de Justicia de Texcoco y en cuanto el médico legista tuvo intervención, informó que al momento del hallazgo, el desconocido tenía cuatro días de muerto y que su o sus verdugos de manera bestial le cortaron las manos aún vivo, lo que ocasionó que finalmente pereciera desangrado.
En un intento por obtener información que permitiera establecer la posible identidad del o de los presuntos homicidas, elementos de la Policía Judicial se entrevistaron con varios de los campesinos de la zona; sin embargo no tuvieron suerte, pues ni siquiera pudieron identificar al ahora occiso.
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