Cae "El Casio", traficaba droga hasta Japón
Phanor Eriko Kuratomi "El Casio", identificado como líder de una red delictiva dedicada al trasiego de droga hacia Japón fue detenido por la Policía Federal en compañía de unas mujeres que pretendía mandar con un cargamento a la ciudad de Tokio.
Según la dependencia federal, Eriko Kuratomi está vinculado con el traslado de enervantes, quien utilizaba la ruta Panamá-México y México-Japón, por medio de la contratación de mujeres, quienes transportan en su cuerpo la droga.
Reportes de inteligencia señalan que "El Casio" vivía en Guadalajara, Jalisco, y refiere que él reclutaba mujeres en el DF, mismas que enviaba hacia Japón para hacer entregas de droga. Una vez que arriban al aeropuerto internacional de Narita, Tokiyo, una persona de nombre Tohishi las recogía para llevarlas hacia otro punto de la citada ciudad.
Tras su detención, "El Casio", de 51 años de edad y originario de Fukuoka, Japón, manifestó que una interna del penal de Santa Martha Acatitla le proporcionaba los datos de mujeres para el trasladar droga hasta Japón.
El aseguramiento de "El Casio" tuvo lugar en Eje 1 Norte y Gran Canal, Delegación Venustiano Carranza, ciudad de México, en compañía de Marisol García Damián, mexicana de 30 años de edad.
Además de Isabel Alamilla Roa, mexicana de 40, quien estuvo presa en el penal de Santa Martha por delitos contra la salud y perteneció a un grupo denominado "Las Aguacateras", dedicado a introducir droga en los reclusorios.
También Zaira Apodaca Vera, mexicana de 30, presunta traficante de droga, misma que la transporta en sus genitales.
Fue asegurado Juan Ignacio Angeles Reyes, mexicano de 38 identificado como encargado de contratar a mujeres para el trasiego de droga, además de conducir el vehículo asegurado donde eran transportadas las mujeres hacia el aeropuerto.
Tras una revisión a las personas y a la unidad, en presencia del ministerio público fueron asegurados tres paquetes en forma cilíndrica, confeccionados en cinta canela con un polvo blanco y las características propias de la cocaína, arrojando peso aproximado de un kilo 500 gramos, así como diversos documentos oficiales y boletos de avión a Tokio.
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