Una nueva “narcomanta” apareció colocada en el puente peatonal del Seguro Social de Cuernavaca, cuya leyenda alude la salida del procurador de Justicia de Morelos, Francisco Coronato Rodríguez: “adiós procurador”.
Una línea abajo los autores interrogan de forma irónica ¿Y Narco Adame?, en una especie de juego con el nombre del gobernador, Marco Adame Castillo.
Hace una semana apareció otra narcomanta en ese sitio cuyo texto fue dirigido al presidente Felipe Calderón y se apeló a un supuesto código no escrito para respetar a los familiares de los presuntos narcotraficantes detenidos.
“…estamos conscientes de nuestros actos, pero en total desacuerdo que involucren a padres, hermanos y familiares. Es una regla mundial que ha surgido en todos los tiempos, la familia se respeta”, cita el texto.
Los “narcomensajes” resurgieron en Cuernavaca luego de que la Policía Federal Preventiva (PFP) cateó un rancho y una quinta en Morelos para detener a 17 presuntos colaboradores del cártel de los Beltrán Leyva.
Desde esa fecha la entidad registró fisuras en su sistema de seguridad pública porque después fueron detenidos policías municipales y ministeriales en el Estado de México, coludidos con secuestradores. Luego comenzaron los arrestos de mandos medios de la Policía Ministerial por su supuesta vinculación con el narcotráfico.
El desenlace de esa crisis ocurrió el viernes pasado con la destitución del fiscal morelense, Francisco Coronato, ex ombudsman estatal, y del Secretario de Seguridad Pública, Luis Ángel Cabeza de Vaca, cuyo cargo desempeñaba desde la gestión del ex gobernador, también panista, Sergio Estrada Cajigal Ramírez.
Tras abandonar el cargo Cabeza de Vaca fue detenido por elementos de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada de la PGR para llevarlo en calidad de “presentado” ante el Ministerio Público Federal. Lo mismo ocurrió con el Secretario de Seguridad Pública de Cuernavaca, Francisco Sánchez, aunque éste se encontraba en funciones.
Sobre el ex fiscal estatal trascendió que también había sido llevado a las instalaciones de la SIEDO la tarde del sábado, pero abogados cercanos al ex procurador confirmaron ayer que se encontraba en su casa aunque ya tramitó un amparo para evitar su posible detención.
Por otra parte trascendió que el Director de la Policía Preventiva, Zona Metropolitana de la SSP, Ramiro Lobato Morales, abandonó el cargo y recurrió al amparo de la justicia federal para enfrentar posibles señalamientos legales en su contra.
Su determinación, según abogados cercanos al comandante, se debe a que a finales de 2001 siendo comandante de la Subprocuraduría de Asuntos contra la Delincuencia Organizada en la Procuraduría General de Justicia (PGJ) del estado, fue relacionado con una banda de robacoches y eso provocó que la PGR le dictara arraigo domiciliario por 90 días. Finalmente el 7 de marzo de 2002, Lobato Morales, fue exonerado de todos los cargos y se reincorporó a la policía preventiva.
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