El cártel de Los Zetas, que fuera brazo armado del Cártel del Golfo, emplea equipos de abogados para despojar de propiedades a empresarios y comerciantes, según datos de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP-f).
Este modo de operación fue corroborado por la dependencia tras la detención, el pasado miércoles 20 de abril, de uno de los abogados de la organización criminal en Cancún, Quintana Roo, cuyo nombre es Marco Antonio Gómez Rodríguez, identificado desde el año pasado por la PGR en la averiguación previa SIEDO/UEIS/346/2010.
Este sujeto, además de dedicarse a la regularización de documentos y a la incorporación de activos al sistema financiero legal, era jefe de un grupo de intermediarios adiestrados en negociar con las familias los montos de rescate por personas secuestradas.
De acuerdo con las líneas de investigación de la PGR y de la SSP-f, verificadas tras la captura, Los Zetas tienen células especiales dedicadas a extorsionar y secuestrar a comerciantes y empresarios —en el expediente se narran casos específicos en las ciudades de Cancún y de Playa del Carmen—.
A cambio de la libertad o de cesar las amenazas e intimidaciones, la organización no sólo exige “fuertes sumas de dinero”, sino títulos de propiedad de los diversos bienes inmuebles o negocios de las víctimas.
Después de la entrega de escrituras, “los equipos de abogados se concentran en realizar los trámites administrativos y jurídicos para cambiarlas de propietarios y cederlas de manera supuestamente legal a integrantes del grupo delictivo”.
Gómez Rodríguez está vinculado con plagios, negociaciones y despojos registrados desde el año 2008, por lo que fue puesto ya a disposición del Juez Cuarto de Distrito en el estado de Quintana Roo.
Y la Familia. En casos distintos, la propia SSP-f ha documentado que, además de Los Zetas, otro de los grupos delincuenciales con este perfil es La Familia Michoacana.
De acuerdo con sus investigaciones, estos cárteles reclutan grupos de expertos financieros, contadores y abogados para “legalizar” extorsiones, cobros de piso y traspasos de bienes inmuebles.
Mediante artimañas legales y bursátiles, las cuadrillas de profesionistas, orquestan deudas millonarias en perjuicio de las víctimas.
“Estos grupos reclutan a personal especializado en temas legales, se trata de expertos en el cobro a través de pagarés y letras de cambio”, reportó la PGR tras la captura por parte de policías federales de un operador de La Familia llamado José Morelos Ledezma El Gato, quien había constituido una red de asesores, consultores, contadores y abogados dedicados a simular adeudos vía la expedición de documentos bancarios, comprobantes notariales y endosos de escrituras.
Entre sus víctimas había ganaderos, restauranteros, hoteleros, profesionistas y dueños de bares y de giros negros.
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