Dos policías del municipio de Briseñas, Michoacán, fueron asesinados esta mañana y su patrulla incinerada por miembros de la delincuencia organizada, cuyos cuerpos fueron dejados en las inmediaciones del municipio de Jamay, en Jalisco.
La información es escaza al momento y las autoridades no han informado al respecto, pero se pudo saber por medios locales michoacanos, que el vehículo policial fue interceptado por sicarios cuando los uniformados realizaban su rondín de vigilancia por el municipio michoacano de Briseñas y se percataron que un grupo de delincuentes asaltaba una gasolinera que se encuentra en la carretera federal de esa población a Vista Hermosa.
Los patrulleros Víctor Manuel Gallegos Macías y Salvador Tapia Pimentel, que tripulaban la patrulla de la Policía Municipal de Briseñas, número 0938, pidieron apoyo vía radio, pero fueron avistados por los delincuentes, quienes de manera sorpresiva los sometieron, los internaron en territorio de Jalisco, en el camino que lleva de la cabecera municipal de Jamay, al poblado rural conocido como Manta Rañas, para posteriormente asesinarlos a tiros e incendiar el automotor.
Los cuerpos y la unidad quemada fueron encontrados al filo de las 5:30 de la mañana de este viernes.
Versiones de policías que acudieron a la zona dijeron que los patrulleros fueron interceptados por sicarios que circulaban en camionetas de lujo, entre la ellas una Ford Lobo blanca, al filo de las 5:30 de la mañana de este viernes.
En la acción se utilizaron armas de asalto, con las que lograron someter a los policías, a quienes se llevaron en la misma unidad policial hacia el entorno del Lago de Chapala, para asesinarlos y dejar los cadáveres junto a la unidad en territorio jalisciense, llevándose también las armas de cargo, dos pistolas y una arma larga.
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