Con visibles huellas de asfixia, amarrados de los pies y cubiertos completamente del rostro con cinta canela, envueltos en cobijas y dentro de la cajuela de un automóvil, fueron descubiertos los cuerpos sin vida de dos hombres.
La Policía Judicial informó que hasta el momento se desconoce tanto la identidad de los ahora occisos como de los presuntos homicidas, los cuales, según la misma PJ, por la forma en que operaron, al parecer son integrantes de algún grupo delictivo dedicado a la venta y distribución de drogas que actuaron en una clara venganza, pues junto a los cuerpos dejaron escrito en una cartulina un narcomensaje que a la letra decía: "Esto les pasó por andarse sintiendo muy vergas, la Plaza no está sola, tiene dueño". En el mismo mensaje los presuntos homicidas lanzaron una amenaza de muerte contra varios comandantes de la Policía Judicial del Estado de México y la Municipal, según afirmaban, "por cobrar sus rentas y no cumplir con sus compromisos".
Los cadáveres de estos dos hombres fueron encontrados la noche de ayer, dentro de la cajuela de un automóvil Volkswagen, tipo Bora, gris, placas de circulación 127-VTY, el cual estaba abandonado sobre la Avenida Paseo de las Villas, a la altura del número 295, frente a un edificio de departamentos, en la Colonia Villas de la Hacienda, municipio de Atizapán, muy cerca de unos juzgados.
Debido a que del interior del Bora emanaba un fuerte olor fétido, además de que dicho auto apareció abandonado desde la madrugada del pasado sábado, vecinos del lugar no descartaron que dentro del vehiculo se encontrara el cuerpo sin vida de alguna persona, por lo que dieron parte a la policía.
Una vez que elementos de la ASE y de la Policía Municipal arribaron a la zona y tras de que practicaron una revisión al auto confirmaron que del interior emanaba un fuerte olor fétido, además de que por una de las rendijas descubrieron que en la cajuela se encontraban los cuerpos de dos hombres, por lo que pidieron la intervención del ministerio público para que diera fe de los hechos.
Más tarde, cuando el representante social ordenó que la cajuela fuera abierta y tras de que inició con las primeras inspecciones oculares confirmó que dentro de la cajuela del Bora se encontraban los cuerpos sin vida de dos hombres desconocidos, los cuales estaban envueltos en cobijas y amarrados de los pies y completamente cubiertos del rostro con cita canela.
Como ya se dijo, los presuntos homicidas dejaron junto a los cuerpos de los desconocidos una cartulina blanca con el mencionado narcomensaje.
sin golpes ni heridas
Después, cuando los cadáveres fueron trasladados a las instalaciones del Semefo de la Subprocuraduría de Justicia de Tlalnepantla y una vez que el médico legista inició con sus trabajos informó que ninguno de los occisos presentaba golpes o huellas de tortura, ni heridas por armas de fuego o punzocortantes en el cuerpo y que al parecer murieron asfixiados debido a que sus verdugos les cubrieron completamente el rostro con cinta canela, lo que les impidió respirar con normalidad.
Autoridades policiacas, informaron que debido a que no se encontró entre las pertenencias de los occisos algún documento o credencial que pudiera identificarlos, hasta el momento se encuentran como desconocidos.
El único dato que se dio de ellos es que uno era de aproximadamente 45 años de edad, 1.70 metros de estatura, complexión regular, moreno claro, cabello corto con varias entradas y que vestía una sudadera negra con capucha, playera blanca, pantalón de pana verde, tenis blancos de la marca Nike, además de que como seña particular presentaba un tatuaje en el pecho con los nombres de Héctor e Israel en cada costado y otro en la pierna derecha con el rostro de un payaso diabólico con sombrero.
El otro era de aproximadamente 35 años de edad, complexión regular, 1.82 metros de estatura, moreno claro, cejas pobladas, bigote y barba cerrada, boca grande, labios gruesos y vestía una sudadera blanca con capucha, playera blanca, pantalón de mezclilla azul, tenis blancos y como seña particular presentaba un tatuaje en el cuello del lado izquierdo y otro en el antebrazo derecho con el nombre de Naoni.
Los cuerpos de los desconocidos permanecen en las instalaciones del Semefo de la Subprocuraduría de Justicia de Tlalnepantla, hasta donde la PJ espera que en las próximas horas se presente algún familiar, amigo o conocido de los occiso para que los identifiquen y de esta forma pueden obtener datos que les permitan avanzar en las investigaciones que supuestamente ya realizan para el esclarecimiento del doble crimen.
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