Asesinados a balazos y con huellas de tortura fueron encontrados los dos agentes de la Policía Ministerial que fueron privados de su libertad la noche del viernes en la capital del estado.
Una de las víctimas fue identificada como Rafael Esquivel Galicia Morales, originario de Mazatlán, pero con residencia en la colonia Salvador Alvarado, en Culiacán; y Víctor Manuel Ochoa Sánchez, con domicilio conocido en la comunidad La Cofradía, en Navolato.
El hallazgo de los cadáveres se registró a las 00:20 horas sobre el camino de terracería que conduce de la sindicatura San Pedro al poblado Las Bebelamas de San Pedro, en las inmediaciones de las cribas Santiesteban, en el municipio cañero.
El Centro de Mando de la Policía recibió un reporte que alertaba de la presencia de dos cuerpos sobre dicho camino, a unos 300 metros al poniente del paso del río Culiacán.
Varias unidades de la Policía Municipal de Navolato se trasladaron al lugar, donde encontraron los cadáveres de los dos investigadores tirados a un costado del camino.
Ambos cuerpos estaban boca arriba con visibles huellas de tortura y múltiples balazos, llenos de tierra, además se encontró un radio Matra desarmado.
Junto a los cuerpos las autoridades localizaron 42 casquillos calibre 7.62x39 milímetros para fusil AK-47 de "cuerno de chivo" y de calibre .9mm.
De acuerdo con la información del médico legista de la Procuraduría General de Justicia del Estado, los investigadores asesinados fueron arrastrados.
Los 'levantaron' en la Sanalona y Revolución
Los agentes de la PME Rafael Esquivel Galicia Morales y Víctor Manuel Ochoa Sánchez fueron "levantados" la noche del viernes por varios gatilleros cuando circulaban a bordo de una pick up en los límites de las colonias Guadalupe Victoria y Miguel Hidalgo.
De acuerdo con la información proporcionada por las autoridades, ambos elementos estaban adscritos al Grupo Beta de la Policía Ministerial del Estado, que se encarga de ejecutar órdenes de aprehensión.
La privación ilegal de la libertad de los investigadores ocurrió a las 21:40 horas del viernes en el cruce de la carretera a Sanalona con la avenida Revolución.
La unidad quedó abandonada en ese crucero.
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