Los cadáveres de cuatro personas fueron localizados la mañana de hoy en la caja de una camioneta de modelo reciente, sobre el Paseo de la Revolución a la altura de la Colonia Zumpimito, en la salida a Lombardía; las víctimas habían sido levantadas el día anterior, y por lo que se aprecia a simple vista las torturaron y asesinaron mediante asfixia, según las primeras investigaciones; uno de ellos es un empresario y conocido aguacatero de esta ciudad, que pudo haber sido levantado en una de sus huertas por el rumbo de Jujucato.
A eso de las 7:00 horas, algunas personas que pasaban por la banqueta del Paseo de la Revolución, frente al negocio denominado "Carnitas Molina", se percataron que en la caja de una camioneta arena, Chevrolet tipo Cheyenne, y placas de circulación MW-81-434, se apreciaban varios cuerpos humanos semicubiertos con una cobija, por lo que dieron parte a las autoridades correspondientes.
Se trataba de cuatro cuerpos semidesnudos, atados de pies y manos, con visibles huellas de tortura, principalmente varios cortes horizontales y transversales en el tórax, practicados con alguna arma punzocortante; no se localizó herida alguna producida por arma de fuego, por lo que se presume fueron asfixiados por sumersión y lesionados con alguna navaja.
El conocido aguacatero fue identificado como Rodrigo Alvarez Chávez, de 33 años de edad, de profesión licenciado en administración de empresas y con domicilio en la Avenida Latinoamericana número 355 de la Colonia Los Angeles, en esta ciudad.
Según manifestó Javier Alvarez Mendoza, de 58 años, padre del profesionista, su hijo salió de su casa el día anterior como a las 9:30 horas a bordo de la camioneta Cheyenne descrita anteriormente, con la finalidad de dirigirse a una de sus huertas de aguacate por el rumbo de Jujucato, al parecer con tres trabajadores, pero no volvieron a saber nada de su paradero.
Otro de los cadáveres fue identificado como Elías Gutiérrez Cruz, de 28 años de edad, quien tenía su domicilio en la calle Jacarandas número 15 de la Colonia Jardines del Cupatitzio, emigrante que hacía una semana había regresado del vecino país del norte, levantado el día anterior de la calle Insurgentes cuando se registró una balacera en la que murieron el padre de la víctima y un mecánico vecino, frente a la casa marcada con el número 217, en esa misma colonia, por un grupo de sujetos fuertemente armados que huyeron llevándoselo a bordo de una camioneta gris, Pathfinder.
Las otras dos víctimas, trabajadores del aguacatero, no habían sido identificadas hasta la tarde de hoy. De los hechos tomó conocimiento el agente cuarto del ministerio público investigador.
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