Un comando armado atacó al coordinador del Centro de Inteligencia Policial (Cipol), Luis Prieto, disparándole en más de medio centenar de ocasiones en Ciudad Juárez. En el atentado murió uno de sus escoltas y quedaron heridos el jefe policiaco y otro agente.
Los sicarios, al no lograr su objetivo principal, acudieron al hospital donde fueron trasladados los heridos y en un intento de rematarlos dispararon contra la clínica. Sin embargo, el edificio estaba fuertemente resguardada por policías, según informó la autoridad municipal.
El reporte preliminar de los hechos indica que los tres oficiales se encontraban en activo, vestían el uniforme reglamentario y tripulaban una Dodge Durango, patrulla oficial de la corporación cuando fueron atacados.
El blanco de los sicarios era el coordinador general de la corporación estatal, Luis Prieto, el cual resultó lesionado, mientras que uno de sus escoltas, Esmer Hernández, murió en el lugar de los hechos y el otro agente sufrió algunas lesiones.
El ataque se dio cuando los policías salían de un restaurante de carnitas de cerdo ubicado sobre la avenita Tomás Fernández.
Un grupo de hombres a bordo de un vehículo de color negro dispararon contra los agentes, los cuales repelieron la agresión y lograron herir, cuando menos a uno de sus agresores.
Los agentes de servicios periciales levantaron del lugar de los hechos medio centenar de casquillos de AK-47.
Cuando una ambulancia transportaba a los agentes heridos, la unidad de Cipol que los custodiaba se volcó, resultando dos agentes más heridos, quienes a su vez fueron trasladados a recibir atención médica.
Más tarde, la policía localizó abandonada la camioneta que utilizaron los sicarios, la cual tenía en su interior manchas de sangre, y en su interior una granada de fragmentación. El vehículo estaba en el estacionamiento de una tienda comercial.
Además, en la avenida Vicente Guerrero, otra patrulla de la Cipol que acudía a
la escena del crimen, chocó contra tres vehículos, entre ellos un Cadillac, un Maxima y un Toyota de reciente modelo.
También soldados a bordo de unidad oficial de color verde chocaron cuando se dirigían al lugar del atentado.
Mientras tanto, la violencia generada por el crimen organizado dejó un saldo de 23 personas muertas en diversos estados .
En Chihuahua hubo 12 personas ejecutadas; en Durango y Michoacán hubo cuatro, en cada entidad.
En el Estado de México mataron a dos personas y en Guerrero, en la comunidad de la Unión fue localizado un hombre colgado de un poste de luz, quien tenía un balazo en la cabeza.
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