Un grupo de sicarios mató el martes al jefe de la policía de Ciudad Juárez, norte de México, y a dos de sus guardaespaldas cuando viajaban en un automóvil.
Simultáneamente en Reynosa (noreste de México, frontera con Estados Unidos) intensas balaceras que se prolongaron entre dos y cuatro horas dejaron un saldo preliminar de al menos cinco presuntos sicarios muertos.
La más violenta
Ciudad Juárez, fronteriza con Texas, es considerada la localidad más violenta de México. Los distintos episodios de violencia dejaron el martes 11 personas ejecutadas, entre ellos el subjefe de la policía, un capitán retirado del Ejército.
El capitán Sacramento Pérez, número dos de la policía local y dos policías que le acompañaban fueron ultimados a balazos la tarde del martes en las cercanías del consulado de Estados Unidos, informó la Alcaldía.
El militar viajaba en una camioneta patrulla acompañado de los elementos policiales cuando el vehículo fue interceptado por otras dos camionetas, con al menos seis hombres armados en cada una, según dijeron testigos.
"Comenzaron a disparar por dos lados hasta darles muerte", relataron los testigos que se encontraban en el lugar de los hechos, una zona altamente vigilada debido a la presencia de la misión diplomática estadounidense.
La zona norte de México es escenario de constantes disputas entre presuntos sicarios y fuerzas del orden pese al operativo de más de 36 mil militares que mantiene el gobierno mexicano.
La violencia ligada al narcotráfico dejó en 2008 más de 5,300 muertes violentas, según cifras oficiales, de las cuales 1,656 ocurrieron en Ciudad Juárez.
Zona cercada
Tras el crimen las autoridades pusieron en marcha un amplio dispositivo en toda la ciudad en busca de los atacantes. En el operativo participaron agentes municipales, estatales y miembros del Ejército.
Los agresores del jefe policial usaron fusiles automáticos, mataron a dos de los escoltas e hirieron a un tercer guardaespaldas, quien fue trasladado a un centro asistencial.
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