De acuerdo con analistas, la muerte de los agentes policiales tiene que ver en ocasiones con las relaciones ilegales que algunos mantienen con la delincuencia organizada, en condiciones de ofrecerles cantidades de dinero muy superiores a sus salarios para corromperlos.
Las ejecuciones en contra de los uniformados llegaron a más de 100 en los primeros seis meses de este año.
Han sido 109 los policías muertos de distintas corporaciones entre el 1 de enero y el 23 de junio. De los fallecidos 22 eran policías federales, otros 22 estatales y 65 municipales.
Entre las ejecuciones de los mandos policiacos, destaca el del coordinador general de Seguridad Regional de la Policía Federal Preventiva (PFP), Edgar Millán Gómez, mientras llegaba a su domicilio en la ciudad de México.
Asimismo, meses después, Igor Labastida, comandante de Tráfico y Contrabando de la PFP, también fue ejecutado en el Distrito Federal, en un restaurante.
En todo 2007 la cifra de policías mexicanos de diversas corporaciones asesinados de forma violenta ascendió a 227, señala el periódico.
De ese total, 34 fueron federales, 73 de corporaciones dependientes de los 32 gobiernos estatales del país y 120 municipales.
En lo que va de año la ola de violencia que afecta a México por la acción del crimen organizado y de los cárteles de drogas se ha incrementado.
El combate a estos grupos criminales es una de las prioridades políticas del presidente Felipe Calderón, que desde que asumió el poder hace poco más de un año y medio ordenó el despliegue de varias decenas de miles de militares y agentes federales por los estados más conflictivos del país.
0 comentarios:
Publicar un comentario