Grupo criminal acusa a otro de cobrar cuotas a los maestros en planteles educativos de puerto.
De acuerdo con un informe de la firma de inteligencia estadounidense Stratfor, el pasado 23 de agosto una organización criminal envió una carta de extorsión a un administrador financiero de la Secretaría de Educación Pública de Acapulco en la que le exigía los nombres, direcciones y números de teléfono de los maestros que ganan entre 20 mil pesos y 50 mil pesos al mes, así como copias de sus credenciales del IFE y una copia de la nómina.
Después de que la firma de inteligencia Stratfor y reportes de la prensa local dieran a conocer que en Acapulco, Guerrero, los cárteles de la droga han comenzado a intimidar a los profesores de la región para que paguen el llamado “derecho de piso”, esta mañana fueron colocadas tres mantas en las que se acusa a un grupo criminal de cobrar cuotas a los maestros en planteles educativos del puerto.
Hoy por la madrugada, una llamada anónima denunció al servicio de emergencias que un grupo de hombres armados colocaron una manta de 3 metros de largo en la entrada de las instalaciones de la Coordinación de Servicios Educativos zona sur Acapulco-Coyuca.
Otra manta con el mismo mensaje fue colocada en la escuela Federal Número 9, que se encuentras en la Colonia Ciudad Renacimiento, y otra más, en una telesecundaria en la Colonia Postal.
De acuerdo con la prensa local, las narcomantas; amenazaban a un grupo criminal por las extorsiones impuestas a los maestros de la región.
Víctor Aguirre Garzón deja de andar firmando por los Beltrán Leyva y Zetas y deja de andar cobrando cuotas a los maestros, el Cártel de Sinaloa no extorsiona no roba, no secuestra Atte. Los Calentanos”, decía el mensaje.
Según un informe de la firma de inteligencia estadounidense, el 23 de agosto una organización criminal envió una carta de extorsión a un administrador financiero de la Secretaría de Educación Pública de Acapulco en la que le exigía los nombres, direcciones y números de teléfono de los maestros que ganan entre 20 mil pesos y 50 mil pesos al mes, así como copias de sus credenciales del IFE y una copia de la nómina.
En la misiva, el cártel anunciaba que a partir del 1 de octubre, los maestros tenían que dar el 50 por ciento de su salario mensual y de su bono anual.
Un día después, la prensa de Acapulco reportó que 80 escuelas de la región suspendieron las clases. Más de 600 maestros del sector se rehusaron a continuar con sus actividades por temor a amenazas de extorsión y secuestros que habían recibido por parte de grupos narcotraficantes que operan en la entidad.
La secretaria de educación en el estado, Silvia Romero fue quien recibió la carta y en ella, el cártel le indicaba que tiene 15 días para entregar la lista con nombre de profesores con los datos de los profesores de la zona escolar 32.
Asimismo, a la profesora se le pide que les notifique a los maestros que estarán al pendiente de sus altos cobros que le hacen a padres de familia y que recibirán “una visita especial”.
Después de que los profesores de Acapulco decidieran cerrar las escuelas hasta que se les diera algún tipo de protección, la policía municipal sostuvo una reunión por más de cuatro horas con el sindicato de maestros. El delegado de la sub coordinación de la región Acapulco-Coyuca, Julio César Bernal Resendiz, dijo que se acordó reforzar los operativos de seguridad, rondines, retenes para proteger tanto a los maestros como a los alumnos. En los operativos, participaría el Ejército y la Marina. Fue así como se reanudaron las clases.
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