Como si se tratara de un personaje vampírico del romanticismo, oficialmente el capo Ignacio Coronel está muerto, pero fuera de este ámbito se construye la leyenda de que aún cobra su cuota de sangre. Lo sugiere la periodista Anabel Hernández, pero también Gerardo Ortiz, quien compone corridos para el Cártel de Sinaloa.
Este último, compositor y cantante, recién ha lanzado al mercado su álbum Morir y existir, cuyo tema principal lleva el mismo nombre y va dedicado a "Nacho" Coronel con una letra que refuerza las dudas sobre su muerte a manos del Ejército mexicano el 29 de julio de 2010 en Zapopan, Jalisco.
Seis días después de anunciado el deceso de uno de los capos del Cártel de Sinaloa, fue subido a You Tube un adelanto de la historia que Gerardo Ortiz había comenzado a componer, la cual oficialmente vio la luz en la primavera de este 2011.
Entre las frases más sugerentes sobre la leyenda de que "Nacho" Coronel en realidad no fue abatido por el gobierno que se encuentran en el narcocorrido de Ortiz, están: "...si publican que no existo, ya me hicieron un favor" y "Nacho Coronel también es jefe, no sabe si la muerte se inventó".
La periodista Anabel Hernández en su libro Los señores del narco señala que en el Centro de Estudios del Ejército y Fuerza Aérea de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) existe una materia de inteligencia militar denominada "Análisis de contenido de narcocorridos", la cual examina este tipo de canciones para conocer más de los narcotraficantes, ya que se considera que éstos dan el visto bueno a las composiciones que se les hacen.
En consonancia con lo sugerido por las líricas de Ortiz, uno de los compositores de moda de narcocorridos en México y Estados Unidos, Hernández en su libro apunta que sobre "Nacho" Coronel se teje la leyenda de "El Inmortal".
De acuerdo a la misma autora, el capo en realidad se habría "jubilado" del negocio del narcotráfico y no estaría muerto como lo difundió el gobierno federal y la prensa nacional e internacional.
Radicado en California, el veinteañero Gerardo Ortiz ha lanzado alrededor de una decena de discos en vivo y de estudio en su carrera que abarca desde su infancia; pero ha sido en su etapa de juventud cuando compuso corridos dedicados a los nombres más notables del Cártel de Sinaloa o Del Pacífico, entre ellos Ismael "El Mayo" Zambada, Manuel Torres, "El M-1" e Ignacio "Nacho" Coronel.
Sus polémicas letras sobre narcos, ejecuciones, armamentos y balaceras no han sido ajenas a sus propias vivencias, ya que en marzo de este año sufrió un atentado, en el cual murieron su chofer y su representante artístico.
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