La Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) informó la detención de 13 sujetos más vinculados a la multiejecución del 8 de julio en Valle de Chalco.
Entre los presuntos delincuentes destacan Fernando Pérez Delgado, alias “La Morsa”, de 58 años, quien era Jefe de Turno de la policía municipal de Valle de Chalco; además de Javier Monroy Flores, alias “La Paca”, de 36 años, ex elemento del Ejército, adscrito al cuerpo de Guardias Presidenciales.
Les fueron asegurados seis vehículos acondicionados para almacenar droga en compartimentos secretos, una escopeta calibre 12 milímetros, tres pistolas calibre 9 milímetros y una pistolas 45; cien cartuchos útiles, una máscara antigás, pasamontañas, seis celulares y 29 kilos de marihuana.
El resto de los detenidos fueron identificados como: María Hermelinda Trinidad Pérez, “La Chila” de 36 años; Aparicio Barrios Benito, “El Beno” de 34 años; José Luis Medina Jardón de 46 años; Luis Eduardo Median Herrera de 29 años; Andrés Barragán Pascual de 37 años; Luis Alberto González Hernández, “El Caballito” de 25 años; Juan Santos Fiscal de 48 años; Javier Morado López, “El Güero Michoacano”, de 36 años; Juan José Salazar Sánchez “El Salazar” de 26 años y Juan Carlos Días Sánchez, “El Carlitos” de 26 años .
El último detenido responde al nombre de José Luis Vázquez Sánchez, “El Chiquilín”, de 43 años, también policía municipal; a los 13 se les ha comprobado tener vínculos con "La Familia".
“La Morsa” es identificado como el sujeto que daba las órdenes en la célula delictiva y aunque se ostentaba como subdirector de la policía municipal de Valle de Chalco, su cargo oficial era Jefe de Turno.
El procurador Alfredo Castillo Cervantes afirmó que todos los detenidos forman parte de “La Familia Michoacana” y se ha corroborado su participación en los hechos donde fueron asesinadas 19 personas, en casos registrados el 26 de junio y el 8 de julio.
En conferencia de prensa sostuvo que las ejecuciones son producto de una lucha entre “Los Caballeros Templarios” y “La Familia”, cuyas células buscan el control en la venta y distribución de narcóticos.
“La Paca” perteneció al Ejército Mexicano y desertó en 2010 para integrarse a “La Familia”.
Según la PGJEM es uno de los principales distribuidores de cocaína en polvo y piedra en Valle de Chalco e Iztapalapa, producto de lo cual obtenía 60 mil pesos a la semana.
Por otro lado, “El Caballito”, “El Güero Michoacano”, “El Salazar” y “El Carlitos” formaban una célula que controlaba la venta y distribución de droga en Ixtapaluca y fue a ellos a quienes se les aseguró la marihuana en el operativo de las autoridades.
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