Luego de más de una semana, el cuerpo del joven que fue encontrado ejecutado y con las manos amputadas y huellas visibles de tortura fue identificado por sus familiares, el joven es originario de la frontera norte del país y tenía su residencia en la ciudad de Los Mochis.
Quien murió llevaba por nombre Juan Alonso Arellanes Benítez, de 30 años de edad y tiene su domicilio en el fraccionamiento Santa Lucia de esta ciudad, aunque según se dijo, es originario de Mexicali, Baja California.
Cabe recordar que el reporte sobre este hallazgo se recibió a las 21:40 horas del sábado, cuando autoridades municipales fueron alertadas sobre un cuerpo tirado a un costado del bulevar Macario Gaxiola, frente a unos moteles.
Al acudir los elementos policiacos, confirmaron la presencia del cuerpo que vestía pantalón café y camisa de resaque color gris y que tenía un tatuaje de un brazo izquierdo.
El cuerpo fue encontrado sobre un camino de terracería a la altura de un dren que corre paralelo al bulevar antes mencionado.
De inmediato la escena del crimen fue acordonada y llamó la atención el grado de tortura que presentaba el cuerpo, al que se le apreciaban diversas laceraciones en el tórax y brazos, así como la amputación de ambas manos y algunos dedos de los pies.
Las manos, fueron dejadas sobre un mensaje escrito en una cartulina que dejaron los homicidas a un costado del cadáver, y en el que se señalaba a la víctima como ladrón de autos y casas habitación, el homicidio se lo atribuía un grupo que firmaba como la “L”.
Familiares de quien perdió la vida informaron que Arellanes Benítez salió de su domicilio a vender un automóvil y cuando regresaba fue “levantado” por una par de sujetos que portaban armas y lo estaban esperando.
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