Un padre de familia vecino del poblado Pichilingue muerto y su hijo menor de edad lesionado a balazos fue el saldo de una emboscada suscitada en un camino vecinal que comunica de la comunidad en mención a Veranos, donde el adulto y el menor fueron atacados desde el monte a escopetazos.
El fallecido fue identificado por sus familiares como Rosauro Rojas Portillo, de 54 años, quien se dedicaba a la agricultura y la ganadería, mientras que el herido que fue trasladado a un nosocomio de Mazatlán dijo llamarse César Saúl, de 16, ambos con domicilio en el pueblo de Pichilingue, sindicatura de El Recodo.
El matentado se originó a las 9:30 horas, cuando al parecer padre e hijo regresaban a su domicilio a bordo de dos caballos de un potrero donde encerraron ganado y aproximadamente a un kilómetro antes de llegar al poblado donde radican fueron atacados a balazos.
En el lugar cayó del animal herido de muerte Rojas Portillo, mientras que el joven fue herido en el hombro derecho por lo que aceleró el paso del animal mismo que asustado por las detonaciones lo llevó hasta su domicilio.
De inmediato el menor fue trasladado por un hermano a bordo de una camioneta a un hospital de Mazatlán, donde fue internado y su estado de salud fue reportado por las autoridades como estable.
Mientras esto sucedía, familiares de la víctima se trasladaron hasta el sitio de la emboscada donde encontraron tirado al adulto boca arriba con heridas de bala en el lado izquierdo de su pecho por lo que solicitaron el apoyo de autoridades policíacas.
Los policías arribaron a la zona varios minutos después solo para cerciorarse que el herido ya había fallecido debido a las complicaciones que le generaron las lesiones que recibió en su cuerpo.
Posteriormente llegó hasta el sitio del deceso el Agente del Ministerio Público Especializado en Homicidios Dolosos acompañado de peritos especializados de la Procuraduría General de Justicia de Sinaloa.
Los especialistas ubicaron en una especie de campamento que se encontraba en un área enmontada que está a escasos 15 metros de donde quedó el cadáver, una silla, botellas de refresco, agua y yogur, además de al menos un casquillo percutido para escopeta calibre .12, misma que se supone fue utilizada para asesinar al campesino y ganadero y herir a su vástago.
Luego de que los criminalistas recogieron la evidencia que se encontraba en el lugar, el representante social ordenó el levantamiento del cuerpo mismo que fue trasladado a una casa funeraria de la sindicatura de Villa Unión, donde se le practicaron los exámenes correspondientes.
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