Tres municipios del noreste de Nuevo León que colindan con Tamaulipas se encuentran en virtual estado de sitio: las familias se atrincheraron en sus hogares, todos los negocios cerraron sus puertas y en Cerralvo se reportó el robo de vehículos propiedad del municipio.
El hecho más grave se registró en el municipio de China, donde un comando plagió a 12 integrantes de una familia, entre ellos dos niños, mientras que Bravo y Cerralvo fueron prácticamente tomadas por presuntos miembros de la delincuencia organizada.
En la madrugada de ayer, un grupo armado tomó por asalto unas viviendas de la colonia Revolución, en el municipio de China, y se llevaron a familiares de un conocido comerciante del lugar, quien tiene relación con una empresa de autotransporte.
Versiones de varios lugareños indicaron que durante la madrugada de ayer los presuntos miembros del crimen organizado asaltaron varios domicilios de la colonia Revolución y a balazos sometieron a todos los integrantes y se los llevaron.
El hecho produjo pavor entre los habitantes de China, quienes por la mañana constataron sorprendidos que los domicilios lucían destrozados por el impacto de las balas.
La indicación para los habitantes fue que se resguardaran en sus domicilios y que cerraran las gasolineras y negocios del pueblo; lo mismo pasó en el municipio de Bravo, cuyos habitantes temían enfrentamientos entre autoridades y sicarios al servicio de la delincuencia organizada.
En este municipio que colinda con China los trabajadores de las maquiladoras y fábricas del lugar fueron acuartelados en sus fuentes de trabajo hasta que pasara el estado de alerta que estaban viviendo.
Otro de los municipios que también vio su vida paralizada fue Cerralvo, donde también grupos fuertemente armados se robaron cuatro vehículos propiedad del municipio, aunque más tarde regresaron uno.
En esta localidad, los grupos armados circularon por las calles de la cabecera municipal aterrorizando a los residentes, a quienes ordenaron encerrarse en sus hogares.
También fueron cerrados todos los negocios, se suspendieron las clases en las escuelas y cesaron las actividades en la presidencia municipal.
Con pavor
La indicación para los habitantes fue que se resguardaran en sus domicilios y que cerraran las gasolineras y negocios del pueblo; lo mismo pasó en el municipio de Bravo, cuyos habitantes temían enfrentamientos entre autoridades y sicarios al servicio de la delincuencia organizada.
En este municipio que colinda con China los trabajadores de las maquiladoras y fábricas del lugar fueron acuartelados en sus fuentes de trabajo hasta que pasara el estado de alerta que estaban viviendo.
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