Ejecutados en Zacatecas
Un macabro hallazgo cimbró a la sociedad jerezana la mañana de ayer, cuando los cuerpos de dos personas del sexo masculino fueron encontrados sin vida sobre la acera izquierda de la calle Aurora en la zona centro, justo entre los dos centros religiosos más importantes del municipio, el Santuario y la Parroquia.
La aparente tranquilidad que en Jerez se había sentido durante los últimos días fue rota al registrarse este sangriento suceso, ya que los dos cuerpos de personas hasta el momento desconocidas, presentaban varios disparos de arma de grueso calibre, por lo que todo hace suponer que fueron ejecutados.
A media cuadra de la calle en la acera, donde se encontraban los cuerpos, se apreciaban varios casquillos de arma por lo que la ejecución pudiera haberse realizado en el lugar de los hechos.
Los occisos se localizaban boca arriba y en cercanía uno del otro, uno de ellos estaba atado de manos por la espalda y el otro vendado de los ojos, ambos descalzos y a su lado una cartulina con un mensaje: "Esto les va a seguir pasando a todas las personas que sigan poniendo dedo y haciendo denuncias anónimas absténganse a estar como este dedo".
Se considera que oscilan en edades de entre 35 y 45 años, uno de ellos portaba calcetines oscuros, pantalón de mezclilla azul, cinto negro, camisa negra, el otro de aspecto mas joven era de tez blanca y barba, portaba camisa azul a cuadro de manga corta, pantalón de mezclilla azul, cinto negro y calcetín grisáceo.
Se cree que la ejecución se realizó alrededor de las cinco y media de la madrugada, pero fue pasada las siete de la mañana que comenzaron a arribar elementos de la Policía Ministerial y el agente del ministerio público, poco después algunos elementos militares y de la Policía Estatal.
Las corporaciones, apoyadas por la Policía Preventiva, cercaron la calle e impedían el paso de cualquier ciudadano mientras tomaban fe de los hechos, pasadas las ocho de la mañana arribó al lugar servicios periciales, Policía Federal Preventiva y un grupo de militares.
Para esas horas y después de participar en misa dominical de las siete de la mañana, ya salían los feligreses mostrando curiosidad y desconcierto ante el lamentable suceso, pues lograban apreciar los dos cuerpos tirados en vía pública, los cuales finalmente fueron levantados y trasladados a bordo de unidades del Servicio Médico Forense, mientras en la acera quedaban manchas de sangre, como prueba de lo ocurrido en esta zona peatonal y de considerable afluencia ciudadana.
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