Los tres cadáveres fueron encontrados detrás de una bodega del Parque Industrial de Ciénega de Flores, a la altura del kilómetro 37 de la carretera Monterrey-Laredo, al norte de la capital estatal.
Tras recibir la llamada anónima, la Policía Municipal de Ciénega de Flores confirmó la existencia de los cuerpos e informó a la procuraduría el lugar preciso en el que se encontraban.
Según las primeras pesquisas, las tres víctimas, al parecer hombres, fueron asesinadas con un tiro de gracia y después incineradas.
Los efectivos policiales encontraron los cuerpos aún en llamas.
El escenario del crimen fue acordonado por el ejército mexicano, la policía municipal y la estatal, así como por agentes de la fiscalía local.
Los estados del norte de México son el epicentro de la guerra entre los carteles de drogas que se disputan las rutas para el traslado de estupefacientes a Estados Unidos.
La violencia por estas pugnas se ha incrementado además en los últimos años debido al aumento del consumo de droga en el país.
El año pasado este fenómeno dejó la cifra récord de 5.600 asesinatos en el país, pese al despliegue de miles de soldados y agentes federales en los estados más conflictivos.
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