La aparente calma en el país, particularmente en estados donde la violencia llegó a niveles históricos como Chihuahua, Sinaloa, Tamaulipas y Baja California, podría romperse en cualquier momento porque no se ha dado ningún golpe mortal al crimen organizado, el cual podría estar replegado y no abatido.
La investigadora de El Colegio de la Frontera Norte (Colef), Patricia Escamilla Hamm, quien no descartó que venga un “un latigazo” del narco, consideró que la ligera disminución de crímenes de alto impacto en diversos puntos del país puede interpretarse desde diversos escenarios, pero lo más deseable es que el gobierno esté combatiendo de forma eficaz el crimen organizado.
Sin embargo, es probable que las bandas se hayan replegado para reacomodar fuerzas y adaptarse a las estrategias que los gobiernos han anunciado, advirtió en entrevista la investigadora, experta en el área de seguridad con enfoque bilateral e internacional en fronteras.
“Los cambios son temporales. Por ejemplo, cuando se cierran rutas del narcotráfico se ve un cambio porque por esos lugares no cruzan drogas, pero no quiere decir que la actividad haya parado, sino que se están tomando cambios, se reajustan, cambian estrategias y vuelven por otro lado”, afirmó.
La tendencia es que ante las acciones del gobierno, las bandas criminales se reajustan, se adaptan, porque tienen muchos más recursos que los gobiernos, que además de que no han dado un “golpe mortal” a la delincuencia, la cual generalmente se recompone, si detienen a un líder, surge otro que lo sustituye.
Escamilla Hamm no descartó la posibilidad de que se den alianzas entre bandas criminales de diferentes regiones el país, incluso de otras naciones, como estrategia para enfrentar las tácticas institucionales, en este caso de los gobiernos de México y Estados Unidos que anunciaron acciones en conjunto.
La doctora en Ciencias Políticas, integrante del Departamento de Estudios de Administración Pública del Colef, advirtió que las estrategias deben globalizarse ante un crimen globalizado que posiblemente ha hecho alianzas internacionales, algunas ya confirmadas como la de Europa con México y Centroamérica.
Afectaciones a terceros
Sobre las acciones emprendidas por los gobiernos de México y EU, aplaudió que se haya identificado la gravedad del problema del crimen organizado en el contexto regional, pero advirtió que podría tener resultados negativos para la población fronteriza por el incremento en los programas de vigilancia.
Mencionó así la posibilidad de que se incremente las revisiones en las garitas de salida de su país, con lo que la tardanza para cruzar a México se dispararía tanto como las filas para entrar al país del norte, y esto obviamente desalentaría el turismo estadounidense a territorio mexicano.
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