De nueva cuenta los delincuentes atacaron a los policías; en esta ocasión dispararon contra una delegación de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, sin que los agentes que se encontraban adentro resultaran heridos.
La corporación preventiva, así como las estatales y federales han sido blanco de los sicarios.
Tan sólo el 8 de octubre, alrededor de 20 sujetos armados con fusiles y lanzagranadas entraron a las instalaciones de la Policía Municipal y se llevaron a una persona que se encontraba detenida, sin que nadie los repeliera.
Ocho horas después, otro grupo de sicarios intentaron "levantar" a un policía municipal cuando salía de la SSPyTM, aunque en esta ocasión el agente que vigilaba el lugar contestó la agresión, por lo que los delincuentes dispararon contra la fachada de la corporación.
Otra institución vulnerada por la delincuencia organizada es la Procuraduría General de Justicia del Estado.
El 29 de octubre, un comando de sujetos fuertemente armado entró al Servicio Médico Forense y se llevó un cadáver que había sido encontrado carbonizado en el campo El Diez un día antes.
Pero también en esta lucha contra el hampa han sido asesinados en este año 108 policías municipales, estatales y federales, de los cuales 19 eran agentes preventivos locales.
Ayer, un sujeto armado disparó en tres ocasiones contra una delegación de vigilancia de la Policía Municipal en la colonia Villa Bonita, sin que ninguno de los agentes que se encontraban en el lugar resultara lesionado.
El ataque ocurrió alrededor de las 3:30 horas de ayer, en la delegación ubicada por el bulevar Paseo de los Andes y calle Cofre de Perote, junto al parque del fraccionamiento Residencial Villa Bonita.
De acuerdo con la información obtenida, los agentes se encontraban al interior del lugar cuando escucharon tres detonaciones de arma de fuego.
Al salir a la calle observaron que un sujeto corría por la calle rumbo al oriente y metros adelante abordó un vehículo cuyas características se desconocen ya que los policías no pudieron observarlo.
Dos de las balas disparadas se impactaron contra la ventana perforando el cristal; y la tercera en la pared.
Uno de los proyectiles del arma de fuego atravesó el cristal y se incrustó el pared del baño que usan los agentes.
Por el tamaño de las marcas que quedaron en el sitio, las autoridades presumen que dispararon con un arma corta, al parecer un revólver.
Peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado no encontraron casquillos percutidos en el lugar de la agresión.
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