Los tiempos que corren no están para menos, y mientras más consciente se esté de la situación mayores probabilidades habrá de salir con bien de un hecho violento. Esto, aunado a las pláticas impartidas por la SSPM entre los alumnos, contribuye enormemente asumir una actitud responsable y previsoria entre los jóvenes.
Es un día normal de clases en el Centro de Bachillerato Tecnológico, Industrial y de Servicios número 114 de Ciudad Juárez. Decenas de jóvenes estudiantes revolotean en los patios, pasillos y canchas de la institución, mientras otros en los salones toman su clase en medio del barullo.
De pronto empieza a escucharse el penetrante aullido de una alarma que indica que algo ocurre en el exterior del plantel, y casi de inmediato varias detonaciones de arma de fuego, aisladas primero, después en ráfaga, hasta generalizarse y perdurar por varios segundos que parecen eternizarse.
En una acción perfectamente sincronizada a la voz de alerta de los maestros, en todos los rincones de la escuela los alumnos se tiran pecho a tierra y se cubren la cabeza con las manos; en las esquinas, cubriéndose con los filos de las banquetas, tras las jardineras, entre los pupitres, todos, hombres y mujeres, estudiantes, maestros, conserjes y personal administrativo, permanecen por unos instantes boca abajo en el piso, mientras sigue el traqueteo de las armas de fuego en algún lugar afuera, en la calle.
En esa posición se quedan mientras se escucha la voz de los maestros dando instrucciones y vertiendo frases que llaman a la calma, a no levantarse. Pasados varios segundos después de los últimos estampidos, una vez que se considera pasado el peligro, todos se levantan, se sacuden sus ropas y se felicitan "por haber salido con bien".
Fue una de las acciones de concientización por parte de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal entre personal docente y alumnos de las escuelas de la localidad. En esta ocasión tocó al CBTIS experimentar de cerca la sensación del peligro por estar en medio de un tiroteo que podría dejar consecuencias que lamentar.
Días antes de este simulacro, considerado un éxito por los organizadores por la precisión y el orden en que se efectuó, personal de la SSPM impartió varias pláticas a los alumnos, en las que se les dieron instrucciones sobre cómo reaccionar ante una contingencia semejante.
Y la respuesta fue sumamente satisfactoria, reconocieron.
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