Custodios del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Hermosillo, Sonora, encontraron un fólder tamaño carta, en el que se anunciaba la rifa de un cuarto amueblado, con servicio de baño, aire acondicionado y cocina integral en el pabellón número 2.
El hecho no sorprendió al director del Sistema Estatal Penitenciario, Ricardo Ornelas Saavedra, quien confesó que desde que asumió el cargo –el pasado 4 de enero– se enteró de la existencia de 130 cuartos llamados por los propios internos “suites” o “VIP”, de los que a la fecha sólo quedan 54.
“Lo que estamos haciendo es derribando estas casas, ya quitamos 76, cada semana las estoy mandando destruir poco a poco porque se corre el riesgo de que los reos quemen el lugar”, dijo el funcionario.
Además, confesó que dichas celdas de lujo fueron construidas debido a la corrupción que imperaba en el lugar, pues los reos pagaban a los comandantes y custodios para poder edificarlos.
Ornelas Saavedra comentó también que las celdas “VIP” son habitadas por una y hasta tres personas que después de la demolición serán reubicadas a las celdas normales, ya que están instaladas en lugares prohibidos como pasillos y corredores del Cereso.
“Todavía quedan cerca de 60 ó 70 casas como ésta que no hemos querido quitar de golpe, esto ha causado motines y muertes en otros estados de la República y hasta ahorita estamos tranquilos”, dijo.
En el cateo realizado el pasado lunes 18, los custodios hallaron también teléfonos celulares y droga.
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