El procurador de Justicia de Quintana Roo, Francisco Alor Quesada, confirmó esta noche el descubrimiento de 12 cuerpos ejecutados y mutilados por sus captores, al parecer los mismos que hace unos días fueron detenidos.
En breve rueda de prensa y sin dar a conocer más informes, pues la investigación sigue vigente, Alor Quesada puntualizó que la cifra de cuerpos encontrados aún no es definitiva, pues siguen interrogando a los detenidos hace unos días en Cancún, a los que se les acusa, entre otras cosas, de asesinar a un comandante de la policía judicial estatal.
En este momento, el único funcionario que ha dado más información es Julio César Moreno Orendaín, jefe de investigaciones de la policía Judicial de Quintana Roo.
El funcionario confirmó que a raíz de la detención de los sicarios y siguiendo información que proporcionaron en los interrogatorios iniciaron un operativo de búsqueda que ya tenía 72 horas en proceso.
Según se informó, los “narco cementerios” se localizan en la orillas de Cancún, en la zona del ejido Alfredo V. Bonfil, donde se desarrolló la colonia Alamos II
Moreno Orendain manifestó que en los cenotes encontraron cinco cuerpos decapitados y con visibles huellas de tortura, mientras que en otro de los cenotes había 3 cuerpos.
Además, como muestra de la brutalidad con la actuaban los asesinos, elementos del Ejército que participaron en las investigaciones, encontraron la mitad de un cuerpo.
En otra parte de la ciudad, en un cuarto cenote del fraccionamiento Barrio Maya, ubicado a la salida a Mérida, aparecieron tres cuerpos más.
Las autoridades confirmaron que entre los cuerpos que ya presentaban un avanzado estado de descomposición se encuentra el de un padre y su hija de unos 17 años, secuestrados por un comando armado en la colonia Valleverde.
De acuerdo con las investigaciones vigentes, al mismo grupo se les vincula con otras ejecuciones múltiples con características muy similares.
Apenas el pasado 6 de junio se encontraron 6 cuerpos en el interior de un pozo de agua, 3 de las víctimas recibieron casi 20 puñaladas en el corazón, lo que inicialmente llevó a la policía a pensar que les había sido extraído.
En las últimas semanas, las autoridades ya encontraron 24 cuerpos ejecutados por presuntos ajustes entre las mafias del narcotráfico, aunque en esta última cifra se considera que fueron víctimas de secuestros.
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