Cuatro personas murieron y dos quedaron lesionadas durante la madrugada de hoy a manos de un grupo de individuos que les dispararon ráfagas con armas de grueso calibre. Tres de los hoy occisos se desempeñaban como elementos de la Policía Estatal y de la Policía Municipal, uno más era elemento de Seguridad Pública de San Andrés Cholula, de los heridos uno es policía y el otro sujeto se encontraba en una revisión de rutina.
Los elementos caídos fueron identificados como Jesús Sánchez Cano, de 35 años de edad, placa 754, de la Policía Municipal de Puebla; Amador Hernández Gaspar, de 40 años de edad, placa 427, policía estatal adscrito al ayuntamiento de Puebla; Federico Bonilla Ramírez, de 33 años de edad, placa 1459, policía estatal adscrito al ayuntamiento de Puebla y Jesús Eduardo Ramírez Trujeque, de 43 años de edad, elemento de Seguridad Pública de San Andrés Cholula.
En la zona quedaron esparcidos más de 60 casquillos de R-15, mejor conocido como "cuerno de chivo", así como de arma de fuego 9 milímetros.
Todo ocurrió al filo de las 2:45 de la mañana, cuando el conductor de un vehículo Chevrolet Montecarlo negro, con placas de circulación LRG-39-97 del Estado de México, reportó al 066 que un automóvil Pointer gris lo iba siguiendo de manera sospechosa, al recibir la llamada los cuerpos policiacos decidieron investigar, por lo que esperaron a que ambas unidades cruzaran por el Boulevard del Niño Poblano y el Boulevard Atlixco, a la altura del puente.
En el lugar realizaron una exhaustiva revisión de los automotores, sin encontrar datos fuera de lo normal, al terminar la investigación el Pointer gris se fue con rumbo desconocido, sin embargo, a los pocos minutos pasó por ahí un Bora negro, con placas desconocidas, mismo que arremetió en contra de los uniformados y el conductor del Montecarlo, cuya identidad no se revela por cuestiones de seguridad.
Al momento de los disparos dos elementos cayeron muertos a un costado de la patrulla P-371, mientras que más adelante murió acribillado por la espalda el elemento de seguridad de San Andrés Cholula.
Sobre el corredor de la tienda Viana quedó el cuerpo sin vida de otro policía, mientras que el piloto del Montecarlo sólo sufrió algunos rozones y cortadas en la pierna derecha.
Por su parte, el elemento herido responde al nombre de Antonio Solís, quien se encuentra grave debido a los impactos de bala que recibió en el pecho. De inmediato fue trasladado por una ambulancia del servicio de emergencia del 066.
El levantamiento de los cadáveres se realizó alrededor de las 7:00 horas, ese suceso quedó asentado en la averiguación previa 79/2009/AEH.
Según datos que comentó el conductor del automóvil Montecarlo, él iba saliendo de una reunión de AA, por lo que se encargó de repartir a sus compañeros en sus distintos domicilios y que posteriormente ingresó a una tienda para comprar pañales, al salir notó que el conductor del Pointer lo seguía de cerca, por lo que decidió llamar al 066.
Los policías a bordo de la patrulla P-371, realizaron la revisión y posteriormente fueron auxiliados por sus compañeros que iban en la unidad PUH12, quienes se instalaron sobre la lateral del Boulevard Atlixco, a un lado del puente. Los elementos checaron que el Pointer con placas del Estado de Guerrero no tuviera reporte de robo, así como un interrogatorio al conductor, que a decir de su contraparte sacó una licencia del mismo Estado.
Después de los cuestionamientos, el chofer del Pointer gris se fue, y a los pocos minutos pasó un Bora negro que los roció de balas. El testigo se escondió en la parte trasera de la patrulla Dodge Caliber, número P-371, recibiendo varios rozones en la pierna, así como incrustaciones de vidrio en el cuerpo.
Al ver que los agresores se iban, decidió salir y correr, en su camino encontró al policía Federico Bonilla, quien tenía el brazo destrozado por la cantidad de impactos que recibió, el testigo intentó hacerle un torniquete con la sudadera que portaba, pero a consecuencia de que los agresores regresaron, salió huyendo hacia una tienda comercial que se ubica a escasos metros.
El testigo ingresó y se fue a esconder a la bodega, donde dejó varios rastros de sangre, posteriormente salió para ser cuestionado por las autoridades que se encontraban en el lugar a quienes les mostró las heridas que tenía en la pierna, las cuales no eran de consideración, sólo fue valorado por los paramédicos y luego puesto a disposición.
Otro testigo que se encontraba del lado contrario de donde sucedieron los hechos, señaló que el Montecarlo iba circulando sobre el Boulevard del Niño Poblano con sentido a Zavaleta y que era seguido de cerca por tres automóviles, un Pointer gris, un Bora negro y un Jetta rojo.
En el momento en el que detuvieron al Pointer, el Bora se quedó estacionado en el Niño Poblano, mientras que el Jetta se fue por la lateral con sentido a Las Animas. Después de un rato el Bora se dirigió hacia donde estaban los policías, seguido del Jetta y casi al mismo tiempo realizaron los disparos, sólo que el Jetta lo hizo desde arriba del puente.
Los agresores avanzaron por el Boulevard Atlixco y subieron por el camellón para regresar tres veces y continuar con los disparos. Hasta que se fueron con rumbo a Zavaleta.
Estas versiones son extraoficiales y no han sido corroboradas por las autoridades, quienes señalaron que en las próximas horas darán más información.
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