¡Fosa clandestina! en el Estado de México
Macabro hallazgo realizaron moradores de esta localidad, al descubrir sepultados en fosas clandestinas, los cadáveres en completo estado de putrefacción de cuatro personas, tres de las cuales estaban amarradas y amordazadas con lazos y cinta canela y completamente vendadas como momias.
Autoridades policiacas informaron que aunque hasta el momento se desconoce la identidad de los ahora occisos, se tiene la presunción de que pueden ser originarios del Estado de Morelos e incluso se cree que uno de ellos podría ser un comandante de la Policía Municipal de dicho Estado que desapareció misteriosamente desde hace más de 20 días, luego de que salió de su base.
La Procuraduría General de Justicia del Estado de México informó que ya hizo contacto con personal de la Dirección General de Seguridad Pública del Estado de Morelos, a fin de que se presenten en las instalaciones del Instituto de Servicios Periciales de la dependencia para que determinen si alguno de los cuatro occisos es el comandante desaparecido.
El hallazgo de estas cuatro personas se dio luego que moradores de la comunidad de Tlatempa pidieron la intervención de las autoridades policiacas para que se presentaran en el paraje denominado Encino Redondo y se practicara una diligencia ministerial, pues casi tenían la certeza de que en esa zona se encontraba sepultado clandestinamente el cadáver de una persona, ya que de dicho lugar emanaba un fuerte e insoportable olor fétido.
Una vez que el agente del ministerio público, policías judiciales y peritos del centro de justicia de Ocuilán se presentaron en el lugar y tras de practicar las primeras inspecciones oculares auxiliados con perros adiestrados, de manera sorpresiva descubrieron que en la zona no solamente se encontraba sepultado clandestinamente el cadáver de una persona, sino que en un área de aproximadamente diez metros cuadros había otros tres cuerpos.
Por tal motivo, el ministerio público de inmediato solicitó la intervención de elementos del H. Cuerpo de Bomberos para que realizaran las excavaciones necesarias y rescataran los cuatro cuerpos, mismos que casi estaban al nivel de la superficie, pues los presuntos homicidas no se molestaron en hacer un hoyo profundo para cubrirlos de tierra y que nadie se diera cuenta de su presencia.
Posteriormente, cuando los cuerpos fueron sacados, se descubrió que tres de las víctimas estaban amarradas de pies y manos y amordazados con lazos y cinta canela y completamente vendadas como momias.
Más tarde, cuando el médico legista de la Procuraduría mexiquense practicó la necropsia de ley a los cuatro cuerpos, determinó que las víctimas habían sido sometidas a salvaje tortura; que dos de ellas fueron enterradas vivas y las otras dos estranguladas.
De acuerdo con el mismo reporte que proporcionó el médico legista, al momento del hallazgo los ahora occisos tenían más de un mes de muertos y cada uno de los cuerpos fueron sepultados clandestinamente en diferentes tiempos, por lo que se cree que los presuntos homicidas utilizaban dicho paraje como un panteón clandestino para deshacerse de sus víctimas y evadir la acción de la justicia.
La Procuraduría mexiquense informó que ante tales evidencias, elementos de la Policía Judicial ya iniciaron las investigaciones correspondientes y dijo que en las próximas horas se realizará en toda la zona una inspección con perros adiestrados, pues no descartan la posibilidad de que en dicho paraje se localicen más cuerpos sepultados clandestinamente.
La Procuraduría indicó que debido a que los cuatro cadáveres ya se encontraban en completo estado de putrefacción no se pudo determinar la edad, los rasgos físicos ni la media filiación de los occisos, mismos que hasta el momento están en calidad de desconocidos en las instalaciones del Semefo de la dependencia, hasta donde se espera que en las próximas horas se presente algún familiar, amigo o conocido de ellos para identificarlos, pues ello ayudaría en mucho a los trabajos de investigación que ya se realizan para el esclarecimiento del múltiple asesinato.
En tanto por estos hechos, el agente del ministerio público dio inicio a la averiguación previa OCUI/217/2008, por el delito de homicidio contra quien resulte responsable y ahora sólo se espera que este nuevo hecho de violencia y sangre registrado en el Estado de México no pase a formar parte de la larga lista de asesinatos que encuentran guardados y en el olvido en los archivos de la PGJEM.
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