En un operativo conjunto, la Secretaría de Seguridad Pública y la Policía Judicial del estado decomisaron droga valuada en más de un millón de pesos, en dos casas al poniente de la ciudad, informó la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
El estupefaciente, que incluye 22 kilogramos de marihuana y casi uno de cocaína, fue entregado la víspera a la Procuraduría General de la República (PGR).
La droga, al igual que dos armas calibre .9 milímetros, fueron localizadas en dos de las viviendas que habitaba Luis Pablo Becerril Pizano, asesinado la semana pasada, y cuyo cuerpo fue hallado en un automóvil abandonado en la colonia Chenkú, al poniente.
La PGJE detalló en un comunicado que remitió al Ministerio Público Federal, adscrito a la PGR, la droga asegurada, al catear dos predios durante la indagatoria relacionada con el homicidio de
Becerril Pizano.
La entrega se realizó en virtud de que de esa averiguación previa también pueden desprenderse hechos que podrían constituir delitos del orden federal.
Las autoridades federales recibieron dos pacas de marihuana, con peso aproximado de 22.5 kilogramos ambas, nueve bolsas conteniendo unas 360 dosis de cannabis o marihuana con un peso de 4.5 gramos cada una, que hacen poco más de 1.5 kilogramos.
También, un recipiente mediano con marihuana sin embolsar y 13 bolsas pequeñas más con la misma hierba.
Asimismo, se entregó una caja con dos bolsas de piedras amarillentas (crack) en cuyo interior había tres bolsas pequeñas con polvo blanco (cocaína) y seis bolsas pequeñas con piedras
amarillentas.
Así también, se remitió una bolsa de plástico con residuos blanquecinos y tres tubos de cristal.
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