Para huir de la policía, un sicario mantiene de rehén a una familia, pero logra ser detenido


Los 30 minutos más largos de su vida los vivió ayer una familia en la colonia Villa Progreso en Mazatlan, y es que cuando todavía dormían un presunto sicario tocó la ventana de su recámara, les apuntó con un rifle de asalto y los obligó a esconderlo.

Armando recuerda que el hombre, de unos 28 años, le apuntó a la cabeza con un arma R-15, por fuera le gritó: "Ábreme o te quiebro, ábreme... no les va a pasar nada".
Así abrió la ventana y dejó que el hombre entrara, después tranquilizó a su esposa, de 23 años y a su hija de 9. Todos quedaron arrinconados en una cama, mientras afuera se escuchaban balazos y rechinar de camionetas.

Más tarde supieron que el hombre subió por unas escaleras que llevan al patio, así llegó a la recámara del segundo piso, antes había protagonizado un tiroteo donde murió un policía municipal.

Desde hace 25 años Armando vive en la colonia Villa Progreso con sus papás y su familia, nunca había vivido una escena igual y menos en su casa.

"Él estaba vestido de negro y me pidió ropa, le dije 'abre el ropero y agarra lo que te quede' y sí, se puso una de mis camisas y un short... Estaba nervioso, iba y venía por el cuarto", narró.

Mientras el hombre cargaba el arma de asalto, la familia trató de no alterarse para no arriesgar su vida, sin embargo, la niña no aguantó y lloró en medio de sus papás.

"La tranquilicé y el hombre me decía que no pasaba nada. No puedo explicar lo que sentimos, pero estoy seguro que nunca se me va olvidar su cara", dice mientras relata lo mismo a peritos y militares.

Y mientras la familia estaba en peligro en el segundo piso, los papás de Armando, abajo escuchaban pasos en la recámara, pensaron todo, menos que el sicario estuviera adentro.

La familia asegura que el hombre armado no intentó hacerles daño, sólo caminaba nervioso y después guardó el arma en el ropero. Así pasaron unos 25 minutos, después escucharon policías cerca.

"De repente un policía me tocó la ventana y me dijo que abriera, abrí y agarraron al muchacho. Hasta entonces pudimos salir", explicó. En ese momento los familiares supieron lo que pasaba en casa.

El detenido resultó ligado al enfrentamiento donde murió un policía y un presunto sicario, fue identificado como Pedro Reyes Sarabia y al momento de su captura llevaba la camiseta amarilla y el short blanco de Armando.

"La tranquilicé y el hombre me decía que no pasaba nada. No puedo explicar lo que sentimos...".

Armando
Vecino de villa Progreso

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