La Secretaría de la Defensa Nacional calcula que en todo el país hay 500 mil personas vinculadas de distintas formas al narcotráfico, lo que revela, acepta, la dimensión del problema y la magnitud de su combate.
En una reunión privada con 15 diputados federales de todos los partidos políticos, el titular del ramo, Guillermo Galván Galván, reveló que medio millón de personas tienen que ver con esta actividad criminal, desde sicarios hasta sembradores o dueños de comercios, y puestos de vigilancia que dan cuenta de las acciones del Ejército.
Según la versión de legisladores presentes en el encuentro en las instalaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional, el general Galván Galván les informó que del total estimado, 300 mil se dedican a sembrar droga en todo el país; mientras que alrededor de 40 mil ocupan algún liderazgo en diferentes niveles.
El resto son, dijo, entre narcomenudistas, transportistas, distribuidores, y personas que funcionan como orejas.
La reunión, que se realizó el pasado jueves al mediodía, el secretario de la Defensa Nacional hizo una exposición sobre el combate al narcotráfico, y la Iniciativa Mérida, relatan legisladores federales.
Al arranque del encuentro, agregan las fuentes, el general Galván Galván dijo que el combate al narcotráfico podría ser lo que provoque que estas organizaciones criminales recurran al secuestro como vía alterna para obtener recursos.
Diputados advirtieron que Galván sugirió que ante los logros del Ejército en esta lucha, podría detonar esta modalidad criminal.
“Él (Galván) reconoció que los narcotraficantes están lastimados en sus finanzas, y que podría ser que por ello que estos grupos se dediquen a los secuestros”, dijo un legislador consultado, quien pidió reservar su identidad.
A la reunión asistieron el presidente de la comisión de la Defensa Nacional, José Justiniano González Betancourt, los panistas Marco Orozco, Diódoro Carrasco, Alejandro Landero y Guillermo Fuentes, así como los perredistas Javier González Garza, Alfonso Suárez del Real, Cuauhtémoc Sandoval, Celso Pulido y Alma Luna; los priístas Roberto Badillo, Carlos Zataráin, Andrés Cevallos y Carlos Rojas; y la coordinadora de Alternativa, Marina Arvizu.
De parte de la institución armada asistieron el general Guillermo Galván y un técnico que lo ayudó con la presentación de las cifras a través de una computadora.
Galván les informó sobre las áreas de combate, los avances y los números de confiscaciones de dinero y de droga.
En el encuentro, el secretario de la Defensa Nacional expresó su preocupación por los recursos para el Ejército.
Galván expuso que el uso recurrente de helicópteros elevó el consumo de turbosina, a tal grado, que la Secretaría de Hacienda tuvo que inyectar a la institución unos 300 millones de pesos para sufragar los gastos para combustible.
Nuestro presupuesto resulta totalmente insuficiente”, dijo el secretario a los legisladores, según sus propias versiones.
Para este año, la Cámara de Diputados hizo una reforma para que los subejercicios que se dieran resultaran en las distintas dependencias federales se transfirieran a la Defensa Nacional, pero etiquetados para el Plan DNIII, y las necesidades militares ante fenómenos naturales.
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