El blindaje de los vidrios parece que salvó la vida del agente de la PEI, Javier Robles Pérez, al ser agredido con armas de alto poder a bordo de su carro, en el segundo atentado que sufre este año.
La Policía Estatal Investigadora (PEI) confirmó en un comunicado que la víctima de la agresión con fusiles AK 47 y armas de fuego con proyectiles de calibre 5.7, los llamados “matapolicías”, pertenece a esta corporación.
El tiroteo donde resultó lesionado por impactos de bala ocurrió alrededor de las 15:10 horas, al poner en marcha su carro particular, un sedán Volkswagen Passat, modelo 2002, sobre la avenida Saturnino Campoy casi esquina con calle Tres.
MÁS DE 100 CASQUILLOS
Dentro de los siguientes 10 minutos de ocurrido el atentado, esa zona de la colonia Sahuaro Indeco, donde quedaron esparcidos más de 100 cartuchos percutidos, se llenó de policías municipales y estatales.
Según informes de la Procuraduría de Justicia, los gatilleros le bloquearon el paso a Robles Pérez atravesando un pick up Chevrolet Tornado adelante de su auto por la Saturnino Campoy.
El 24 de marzo pasado, Javier Robles Pérez, fue agredido por un presunto sicario cerca del hotel de arraigos en la colonia El Ranchito de Hermosillo donde estaba comisionado como jefe de grupo.
Al atorarse una bala en el mecanismo de la escuadra 9 milímetros del agresor, fue que el policía pudo reaccionar para desarmar a su agresor.
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