Momentos de terror, psicosis y confusión vivieron al amanecer de ayer vecinos de la colonia Scally, tras la inesperada balacera que se suscitó en una casa de seguridad de este sector.
Los planteles cercanos al sitio del suceso violento fueron desalojados una vez que policías federales acordonaron las calles más próximas.
Los padres de familia apenas intentaban acercarse con sus hijos a la escuela Miguel Hidalgo, cuando los policías federales les impidieron llegar hasta el plantel diciéndoles: "Que se vayan, que se vayan", al momento que les hacían señales para que se alejaran cuanto antes.
Fue a las 08:15 horas cuando los agentes federales determinaron desalojar por completo la primaria, la cual se encuentra a escasas tres calles del inesperado tiroteo.
Pidieron a los maestros y al director que se retiraran para que no corrieran peligro.
Además, de inmediato se desplegó un operativo terrestre y aéreo por el municipio; asimismo, más tarde arribaron a la escena elementos del Ejército.
Los profesores Dinora Miranda, Gregorio Cianuqui y José Ramón Camacho expresaron su temor, ya que ellos llegaron a la institución minutos antes de las 08:00 para recibir a los alumnos.
El miedo los invadió de inmediato al enterarse de que a pocas cuadras se habían detonado armas, caso poco común en esta ciudad.
Las patrullas policiacas ya habían sitiado unas tres o cuatros cuadras a la redonda, y esto causó expectación no sólo en los vecinos sino en la gente que pasaba por la zona.
Desorientados. Más cerca aún del lugar de la balacera se encuentra el jardín de niños Rosaura Zapata, donde los infantes entran a las 09:00 horas.
Para ese momento, los profesores ya habían abandonado, por instrucciones de la policía, las instalaciones del plantel.
Esto provocó confusión en los padres de familia, que llegaban y nadie les decía que las clases se habían suspendido.
Lo anterior, aunado al terror que sintieron cuando se enteraron que poco antes se había registrado una balacera en una casa de seguridad cercana.
Los padres de familia no lo pensaron mucho y prefirieron tomar de inmediato la decisión de retirarse del lugar junto con sus hijos para no arriesgar su integridad.
Comentarios.
El rumor del hecho violento que conmocionó a la ciudad muy pronto se expandió y la noticia se empezó a difundir en todos los medios de comunicación.
La gente en la calle hacía comentarios al respecto, pero también se preguntaba qué había pasado con exactitud en la conocida colonia Scally.
Este tipo de cosas no suele ocurrir muy seguido y la curiosidad de los ciudadanos no tardó en hacerse presente y lo mismo se hablaba de la balacera en las tiendas, en los camiones, en otras escuelas y en todos los sectores de la población.
Amenazada la tranquilidad. Al lugar también arribo César Luis Vea Vea, presidente de la Federación de Abogados de Sinaloa, quien expuso que esta balacera es una señal de que la guerra está desbordada.
Asimismo, agregó que sucesos como éste amenazan con romper la tranquilidad de la que se goza en esta ciudad.
Se pronunció a favor de que no se presenten muertes violentas en lo sucesivo y de que las fuerzas federales actúen bien para que garanticen la seguridad. "Ojalá los operativos se hagan dentro del marco de la legalidad".
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