Encajuelado con narcomensaje en el Estado de México
Un día después de que cuatro sujetos lo "levantaron" y se lo llevaron de manera violenta en un automóvil Civic, un presunto distribuidor de droga apareció muerto esta mañana, amarrado de las manos, cubierto del rostro y la cabeza con vendas y una bolsa de plástico transparente, dentro de la cajuela de dicho auto.
Autoridades policiacas informaron que de acuerdo a los primeros reportes que proporcionó el médico legista del centro de justicia local, este individuo identificado como José Carlos Reyes Martínez, de 27 años de edad, fue torturado y posteriormente murió asfixiado por las vendas y la bolsa de plástico que sus verdugos le enredaron en la cabeza y el rostro.
La Policía Judicial informó que de acuerdo a las primeras investigaciones que se realizaron, el ahora occiso y otros sujetos que lograron escapar se encontraban la tarde de ayer en calles de la Colonia San Pedro Xalostoc, al parecer vendiendo y distribuyendo droga, cuando fueron sorprendidos por cuatro individuos fuertemente armados que viajaban en un automóvil Honda, tipo Civic, rojo, placas de circulación 202-TAF, los cuales rápidamente descendieron de la unidad y a punta de pistola intentaron subirlos por la fuerza al vehiculo.
Al percatarse de ello, dijeron los ministeriales, varios de los sujetos que acompañaban al ahora occiso rápidamente corrieron para darse a la fuga, acción que desafortunadamente no pudo hacer éste, quien a punta de pistola y bajo amenazas de muerte fue subido al Civic por sus verdugos, quienes emprendieron la huida a toda velocidad para llevárselo con rumbo desconocido.
SUS FAMILIARES LO BUSCABAN DESESPERADOS
Luego de ello y cuando familiares del ahora occiso ya lo buscaban desesperadamente, el día de hoy al filo de las seis de la mañana, el automóvil Civic fue encontrado abandonado sobre unas vías del tren, ubicadas sobre la calle Ernesto Pugibet, en la Colonia San Pedro Xalostoc, muy cerca de la zona donde horas antes había sido "levantado" el ahora extinto.
Después de que policías municipales de Ecatepec se percataron que el automóvil Civic estaba estacionado de manera incorrecta sobre las vías del tren, rápidamente se acercaron y al practicarle una revisión descubrieron que dentro de la cajuela al parecer se encontraba el cuerpo sin vida de una persona, por lo que pidieron la intervención del agente del ministerio público para que diera fe de los hechos.
Una vez que el MP se presentó en el lugar y tras de que dio la orden de que la cajuela fuera abierta, confirmó que efectivamente en su interior se encontraba el cuerpo sin vida de una persona que estaba amarrada de las manos y que presentaba la cabeza y el rostro completamente cubiertos con vendas y una bolsa de plástico transparente, además de que junto al cuerpo, los presuntos homicidas dejaron una cartulina con un mensaje escrito que a la letra decía; "Esto les va a pasar a los que trabajen para la FAM, siguen ustedes Piel, mono, chaparro, abuelo, ya llegamos putos".
Debido a que el vehiculo fue encontrado muy cerca del domicilio donde vivía el ahora occiso, sus familiares que ya lo buscaban afanosamente, al enterarse de que el auto ya había sido localizado y que dentro de la cajuela apareció muerto José Carlos, de inmediato se trasladaron al lugar y al tener de frente el cuerpo confirmaron la lamentable noticia.
Como los familiares estaban sumamente indignados y no dejaban laborar con libertad a las autoridades policiacas, el ministerio público ordenó que el Civic fuera enganchado con una grúa y trasladado con todo y cuerpo a las instalaciones del Semefo del centro de justicia local, a fin de que en ese lugar se realizaran todas las diligencias correspondientes, sin que nadie los molestara.
La Policía Judicial informó que a pesar de que familiares del ahora occiso aseguraron que desconocían la identidad de los presuntos homicidas y los motivos que tuvieron para asesinar a José Carlos, de quien según dijeron era un hombre tranquilo, que no andaba metido en líos, ni le conocían enemigos, es evidente que estas versiones no son ciertas y que por las primeras investigaciones que se realizaron y por la forma en que se dieron los hechos, el ahora extinto sí andaba en malos pasos, al parecer se dedicaba a la venta y distribución de drogas y por esta ilícita actividad fue ajusticiado en una clara venganza de presuntos mafiosos que siguen cobrando vidas humanas por la disputa de las diferentes zonas donde operan.
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