Tres jóvenes fueron ejecutados adentro y a las afueras de un taller de tapicería de la colonia Los Pinos, por un comando de encapuchados que les disparó en más de 100 ocasiones con fusiles AK-47.
El triple asesinato se presentó en un rango de siete cuadras en el que se encuentran Palacio de Gobierno y la base de la Policía Ministerial del Estado.
Las víctimas fueron identificadas como Juan José Guamba Pardo, de 27 años, hijo del dueño del taller de tapicería en el que se presentaron los hechos; Omar Caín Ramos Estrada, de 24, ayudante del taller, ambos con domicilio en la colonia Los Pinos, y Pedro Gilberto Medina Tizoc, de 24, de quien se desconoce su oficio y su lugar de residencia.
Según las autoridades policiacas, la matazón ocurrió a las 19:50 horas adentro y a las afueras de un taller de tapicería sin nombre, que se ubica sobre la calle Pascual Orozco, entre las calles Sexta y Séptima, en la colonia Los Pinos.
Testigos informaron a los uniformados que hasta el lugar llegó un grupo de sujetos encapuchados que viajaba en un Nissan Tsuru, color blanco, y en un Volkswagen Jetta, color negro, de los cuales descendieron empuñando fusiles AK-47.
Se presume que ellos traían consigo a Ramos Estrada, ayudante del taller, esposado con las manos hacia atrás, y lo bajaron para que les ubicara el lugar donde se encontraba el taller de tapicería en el que trabajaba Juan José.
Segundos antes, Medina Tizoc había bajado de un Nissan Sentra gris, que quedó estacionado sobre la acera del taller, al cual se introdujo presumiblemente huyendo del comando que ya lo seguía.
Sin embargo, los gatilleros se acercaron al lugar y comenzaron a disparar contra Juan José, quien cayó muerto al instante dentro del inmueble, mientras que Medina Tizoc salió corriendo del taller para protegerse, pero fue alcanzado por las balas y quedó muerto sobre la banqueta, a un costado de una Chevrolet Tornado, color blanco, sin placas.
Luego de asesinar a los dos jóvenes, los gatilleros dieron muerte ahí mismo a Ramos Estrada, a quien le despedazaron la cabeza a balazos, para inmediatamente escapar por las calles del sector.
Al lugar arribaron policías de todas las corporaciones y soldados del Ejército, quienes establecieron un cerco para evitar que los habitantes de la zona y los curiosos alteraran la evidencia.
Peritos de la PGJE recogieron del lugar más de 100 casquillos calibre 7.62x39mm para fusil AK-47 "cuerno de chivo", además, una camioneta Ford Bronco negra, que estaba estacionada frente al taller, presentó algunos impactos de bala en la carrocería, así como pedazos de tejido de uno de los ejecutados.
El triple asesinato se presentó en un rango de siete cuadras en el que se encuentran Palacio de Gobierno y la base de la Policía Ministerial del Estado.
Las víctimas fueron identificadas como Juan José Guamba Pardo, de 27 años, hijo del dueño del taller de tapicería en el que se presentaron los hechos; Omar Caín Ramos Estrada, de 24, ayudante del taller, ambos con domicilio en la colonia Los Pinos, y Pedro Gilberto Medina Tizoc, de 24, de quien se desconoce su oficio y su lugar de residencia.
Según las autoridades policiacas, la matazón ocurrió a las 19:50 horas adentro y a las afueras de un taller de tapicería sin nombre, que se ubica sobre la calle Pascual Orozco, entre las calles Sexta y Séptima, en la colonia Los Pinos.
Testigos informaron a los uniformados que hasta el lugar llegó un grupo de sujetos encapuchados que viajaba en un Nissan Tsuru, color blanco, y en un Volkswagen Jetta, color negro, de los cuales descendieron empuñando fusiles AK-47.
Se presume que ellos traían consigo a Ramos Estrada, ayudante del taller, esposado con las manos hacia atrás, y lo bajaron para que les ubicara el lugar donde se encontraba el taller de tapicería en el que trabajaba Juan José.
Segundos antes, Medina Tizoc había bajado de un Nissan Sentra gris, que quedó estacionado sobre la acera del taller, al cual se introdujo presumiblemente huyendo del comando que ya lo seguía.
Sin embargo, los gatilleros se acercaron al lugar y comenzaron a disparar contra Juan José, quien cayó muerto al instante dentro del inmueble, mientras que Medina Tizoc salió corriendo del taller para protegerse, pero fue alcanzado por las balas y quedó muerto sobre la banqueta, a un costado de una Chevrolet Tornado, color blanco, sin placas.
Luego de asesinar a los dos jóvenes, los gatilleros dieron muerte ahí mismo a Ramos Estrada, a quien le despedazaron la cabeza a balazos, para inmediatamente escapar por las calles del sector.
Al lugar arribaron policías de todas las corporaciones y soldados del Ejército, quienes establecieron un cerco para evitar que los habitantes de la zona y los curiosos alteraran la evidencia.
Peritos de la PGJE recogieron del lugar más de 100 casquillos calibre 7.62x39mm para fusil AK-47 "cuerno de chivo", además, una camioneta Ford Bronco negra, que estaba estacionada frente al taller, presentó algunos impactos de bala en la carrocería, así como pedazos de tejido de uno de los ejecutados.
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