Con huellas de haber sido cruelmente torturados, ayer por la mañana fueron encontrados siete cadáveres, en las canchas deportivas del poblado Máximo García, antes El Pino, a 21 kilómetros de esta ciudad por la carretera a Mazatlán, entre ellos el de una mujer, de diversas edades, totalmente desnudos, seis de ellos vecinos de ese mismo poblado y uno de El Soldado.
En la fiscalía del Estado se informó que los ahora occisos respondían a los nombres de Luis Alberto González, de 32 años de edad; Antonio Bustamante, de 40; Cecilia Zúñiga Vázquez, de 42, José Reyes Bustamante, de 35, con domicilio en El Soldado, ubicado por la misma carretera a unos 40 kilómetros de esta ciudad; Francisco Bustamante Ríos, de 75, Sergio Hernández, de 16 años, y José Luis González, de 26, estos últimos cuatro también de la comunidad El Pino.
Fue antes del amanecer cuando se dio aviso a la fiscalía del Estado por parte de las autoridades de ese poblado, en el sentido de la aparición de los cadáveres, perfectamente acomodados sobre las canchas de cemento, cuyo cuadro horrorizó a un grupo de curiosos que se arremolinaron, debido a que la macabra noticia corrió como reguero de pólvora.
En la fiscalía todavía ayer por la tarde no se definía sobre la causa de la muerte, pero se presumió que fue estrangulamiento.
Al darlo a conocer, la fiscal Sonia de la Garza manifestó que ya se está realizando la investigación al respecto.
Los sicarios dejaron sobre los cuerpos unos narcomensajes, como lo vienen haciendo desde tiempo, pero no se sabe realmente sobre el motivo por el cual los ejecutaron.
Los familiares de los ahora occisos pidieron ante la fiscal que se agilicen las investigaciones y se detenga a quienes causaron esta masacre; señalaron que no es posible que sus familiares hayan actuado contra los sicarios, y señalaron que consideran que asesinaron a inocentes.
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