El secretario de Seguridad Pública Municipal, Julián Leyzaola Pérez, confirmó la vigencia de una investigación penal contra los integrantes de Los Tucanes de Tijuana y su representante, Mario Quintero, por presuntos nexos criminales que trascendieron durante la averiguación de un atentado mediante el cual delincuentes pretendían matarlo utilizando camionetas clonadas del Ejército Mexicano, en noviembre del 2009.
Explicó que la investigación inició cuando las autoridades detectaron un video en el que aparecen los cantantes, el cual fue tomado en el mismo lugar donde se localizaron las unidades militares clonadas que serían usadas en el intento de asesinato en su contra.
Desde noviembre del año pasado él advirtió a Mario Quintero que no podían tocar en Tijuana por sus nexos con los hermanos Arellano Félix, recordó el secretario.
"Yo se lo dije al señor Quintero. ‘Aquí no vas a tocar, mientras yo sea secretario de Seguridad de Tijuana, aquí no tocas porque tú eres delincuente, tú eres narco", recordó.
Sostuvo que en ese mismo encuentro le espetó al representante de los Tucanes que sus padrinos son los Arellano Félix y por eso están obligados a mandarles saludos y tocarles sus corridos.
Sobre la investigación hacia los cantantes, recordó que durante la investigación en torno al atentado que estuvieron a punto de perpetrar en su contra, surgió un video en el que aparecen quienes intentarían asesinarlo, y es el mismo lugar donde se encontraron las camionetas clonadas, el que luego aparece como escenario de un narcocorrido.
En esa canción, los Tucanes aparecen cantando que si les detuvieron a cuatro llegarían con 20 más. Necesariamente para hacer ese video, debieron haber tenido contacto con la gente que estuvo ahí, eso es lógico, aseveró.
Leyzaola Pérez recordó que durante los dos años que ha sido secretario de Seguridad Pública de Tijuana, enfrentó cinco intentos de asesinato por integrantes del crimen organizado, la última, utilizando camionetas clonadas del Ejército Mexicano.
También pretendieron matarlo con jugos de frutas envenenados, en otra ocasión los delincuentes intentaron colocar explosivos en sus oficinas, en una más iban a usar una bazuca, y la primera vez en una emboscada.
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